lunes, marzo 06, 2006

E-mail

Miércoles, 21 Febrero 2057

Como cada mañana me levante de mi lecho de muerte en esta vida, con la esperanza – la única compañera fiel de mi vida – de encontrar en mi buzón de correo unas palabras de mi único amor, pero como cada día, desde hace siglos, no encuentre nada.

Me levante de la vieja silla de playa que usaba como silla de escritorio – regalo de mi madre -, con mi animo, otro día mas, por los suelos, para dirigir mi orondo cuerpo hacia la cocina y llenarlo de dulces y cafeína, algo que me hace sentir mejor, pero como todo lo bueno por poco tiempo, ya que cada vez que centro la vista en cualquier pared de mi vetusta casa, la veo, la recuerdo, no la olvido.

Hacia las 11 de la mañana, y tras realizar algunas tareas de la casa y de darle muchas vueltas a la cabeza, me encamine hacia el desván – donde guardo todos los trastos -, con la sana intención - jeje - de encontrar un arma de fuego, ya que mi padre era muy aficionado a ellas.
A los pocos minutos de rebuscar entre un montón de basura y trastos inútiles, encontré lo que estaba buscando, un rifle Winchester 73 – el ojito derecho de papa -.

Después de limpiarlo concienzudamente, abrí el cargador con la ilusión de encontrar algún casquillo olvidado, y ante mi sorpresa efectivamente lo encontré.
Acto seguido, y después de terminar de poner a punto el Winchester, apoye el cañón sobre mi sien derecha y .....¡boom!

P.D. : Te veo dentro de unos días, cuídate Ana, besos.

Jueves, 22 de Febrero 2057

Ana se levanto con la invariabilidad de cada mañana, soñolienta y cansada, pero hoy con motivo, ya que había estado toda la noche pasada en el tanatorio, velando a su amigo.

Antes de salir para el cementerio, encendió el ordenador, como cada mañana, para revisar su cuenta en hotmail, la cual siempre estaba petada, por lo general de correo basura.
Pero aquella mañana le llamo la atención uno en particular, uno en el que el asunto rezaba : “ Miércoles, 21 Febrero 2057”.